Cuando la figura llegó al mercado en 1964 fue un gran éxito. Al principio había cuatro figuras en diferentes cajas, que venía con uniformes básicos, botas, gorra y una etiqueta pegada al cuello. Cada figura representaba una rama de los militares: el soldado, el marinero, el piloto y el marine. A partir de ahí surgió, por primera vez, el término ‘action figure’, para abarcar todos esos muñecos articulados.
Esta primera línea de G. I. Joe estaba en escala 1/6 (unos 30 cm) y tenía una cicatriz en la mejilla derecha de cada muñeco. La cicatriz se ha convertido en una marca entre los niños, pero su verdadero propósito era impedir que otras empresas copiasen el elenco de muñecos.
El nombre de GI Joe vino inspirado por una película de guerra de los años 40 llamada The Story of G. I. Joe, que a su vez procedía de un acrónimo estampado en todas las cajas con mercancía que eran del gobierno (Government Issue – Asuntos de Gobierno).
En el momento de la Segunda Guerra Mundial, para demostrar que el ‘soldado’ era como un objeto del gobierno (su vida y todo lo demás pertenece al país), los sargento pasaron a llamar a sus subordinados de G. I. Joe. El apelativo Joe corresponde a la latinización José, que es el apellido dado a alguien de quien no se conoce su verdadero nombre.
A principios de los años 80, en la sede de Hasbro, una de las empresas jugueteras mas importantes del mundo, decidieron recuperar una de aquellas licencias que antaño les había dado un gran numero de beneficios, G.I. Joe. Pero en vez de apostar por reutilizar el material anterior en una especie de reedición, debido al éxito de las figuras de Star Wars de Kenner, se decidió apostar por el tamaño de 3 3/4 pulgadas (10 centímetros). Bajo el nombre en código Blast Off se comenzó el desarrollo de las primeras figuras y vehículos. Sería el inicio de una de las colecciones mas largas de la historia.
Si algo hay que destacar de las figuras de Hasbro, es sin duda la revolución que supuso su sistema de articulaciones. Hasta entonces, el número máximo de articulaciones de una figura de la época eran cinco, solo una más que los Playmobil. Los diseñadores fueron un paso mas allá y decidieron articular también los codos, la cintura y la rodilla, en una primera revisión se añadió también el antebrazo.
Una de las mayores satisfacciones al sacar la figura de G.I.Joe de su blister (de su cartón, que nos hemos vuelto finos con los años) era la de ver como por fin había un juguete que podía coger su arma con dos manos, ponerse de rodillas y elegir qué accesorios les ponías y cuáles no. Ese fue el segundo gran acierto: los mochilas, cascos y otros complementos no estaban integrados en la propia figura.
A finales de los años ochenta, las grandes batallas del mundo se libraban y solucionaban en los recreos, patios y dormitorios de toda una generación de jóvenes que luchaban por la libertad y el estilo de vida occidental con una serie de figuras de plástico de apenas diez centímetros. G.I. JOE, una de las colecciones de juguetes de mayor éxito de la historia, ejercía una absoluta fascinación en la generación de la época. Lo podían hacer todo. Su combate contra las tropas de Cobra se podía ver en televisión, leer en cómics y disfrutar en las estanterías y mesas de casi cualquier hijo de vecino.
Hasbro puso el punto y final a la colección clásica en 1994, una decisión seguramente provocada por la caída de ventas debida a la caída de popularidad y al auge de los videojuegos. Aunque años después G.I.Joe ha vuelto a las jugueterías, nunca lo ha vuelto a hacer con la misma fuerza que en los años 80. Aunque han hecho sus pinitos en el cine con G.I. Joe y G.I. Joe: La Venganza y hoy en día se siguen publicando sus cómics, nunca mas han vuelto a tener la fuerza que tuvieron antaño. Incluso la linea de Sideshow Collectibles terminó por ser cancelada o por lo menos lleva mucho tiempo sin novedades.
